En Hualgayoc, un empresario de nombre Diego Gilberto Samire Mendoza, decidió levantar la voz para destapar lo que califica como “graves irregularidades” en la Municipalidad.
Pero el escándalo no se queda ahí: las mismas investigaciones que él exige apuntan también hacia su propio nombre.
Fuentes cercanas a la comuna señalan que este “denunciante” habría participado en contratos cuestionados, licitaciones a dedo y movimientos administrativos que ahora intenta presentar como si fueran obra exclusiva de otros.
La población empieza a preguntarse si esto es un acto de valentía para destapar la podredumbre… o una jugada desesperada para salvar el pellejo antes de que el barro lo cubra por completo.